El espacio chileno, organizado por el Consejo de la Cultura, ha tenido alta aceptación del público presente en el encuentro mundial más importante de arquitectura.
La prensa italiana se refiere al pabellón nacional señalando y calificándolo como “uno de los más esperados”, “sutil y consistente”.
La bienal estará abierta al público hasta el 25 de noviembre de este año. Aún no se inauguraba oficialmente y el pabellón nacional “Cancha: paisajes del suelo de Chile” en la 13 Bienal de Arquitectura de Venecia, ya captaba la atención de los primeros visitantes, en su mayoría público especializado y prensa de todas partes del mundo. Y es que la propuesta chilena, organizada por el Consejo de la Cultura y las Artes (CNCA), cuenta con un factor sorpresa: 11 toneladas de sal extraídas del Salar de Tarapacá, las que están dispuestas en el suelo, para que el espectador camine sobre ella y viva una experiencia distinta que en otros pabellones.
Al respecto el Ministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, destaca: “La Bienal de Venecia es la instancia arquitectónica más importante del mundo. Por lo mismo, resulta tan gratificante para Chile participar con un pabellón que da cuenta no sólo del trabajo de nuestros arquitectos, reconocidos internacionalmente, sino que también de la reflexión que existe sobre el rol que tiene la arquitectura en el desarrollo del país. A los chilenos les preocupa lo que ocurre con sus ciudades. Esa inquietud ciudadana está presente en las distintas propuestas de nuestro pabellón, lo que se convierte en una gran oportunidad para generar un diálogo y lograr respuestas que contribuyan positivamente en el diseño de Chile”.
“Queríamos invitar a la gente a pisar suelo nacional, como una forma de estar en Chile, que cuando entren, sea un especie de templo. Por eso además hemos usado un lenguaje visual oscuro, como si estuviera iluminado por velas”, señala Pilar Pinchart; quien junto a Bernardo Valdés fueron elegidos como curadores del pabellón a través del concurso público organizado por el Consejo de la Cultura, y que es comisariado por Cristóbal Molina, Coordinador del Área de Arquitectura del CNCA.
El resultado se ha traducido en una alta rotación de personas por el espacio chileno ubicado en El Arsenal de Venecia, con comentarios como “sensible”, “intuitivo”, “especial” de parte de los turistas extranjeros. Mientras que la prensa italiana ha indicado que es uno de los “más esperados” como el diario el Corriere de Veneto o “un montaje sutil y consistente” como señaló el Corriere della Sera.
La ceremonia de inauguración se realizó ayer a las 18:00 horas en Venecia (mediodía en Chile) con la presencia de destacados arquitectos nacionales: el Comisario del Pabellón y Coordinador del Área de Arquitectura del CNCA, Cristóbal Molina; Alejandro Aravena y el Grupo arquitectónico Elemental; los curadores de “Cancha” Pilar Pinchart y Bernardo Valdés; Genaro Cuadros y Rodrigo Tisi. También asistió el Embajador de Chile en Italia, Oscar Godoy.
Cancha:
Este pabellón presenta siete nuevos textos y ensayos visuales del territorio chileno, realizado por los arquitectos Alejandro Aravena (Elemental), Germán del Sol, Pedro Alonso, Juan Pablo Corvalán (Susuka), Iván Ivelic, Genaro Cuadros y Rodrigo Tisi. Estas propuestas son mostradas en siete lámparas, una por cada autor, las que son acompañadas de 7 documentales de Cristobal Palma. Todo sobre las 11 toneladas de sal chilena. También cuenta con una escultura de neón de Iván Navarro y Pedro Pulido reproduciendo el logotipo de Cancha.
Cancha (nf 'kantʃa) es una palabra prehispánica quechua que indica un vacío que permite conexiones con nuestra tierra, así como entre las personas. La palabra se utiliza en América del Sur para designar un campo con límites y reglas, donde la gente juega. También en Chile se utiliza como un espacio abierto en donde la cosecha es medida y distribuida. En términos urbanos es similar a la Plaza Mayor española. Cancha es la referencia utilizada aquí para comprender el suelo chileno, un terreno común que no es urbano, sino territorial.
El Pabellón se presenta como una instalación medioambiental con el objetivo de involucrar a los visitantes en una experiencia directa con el suelo chileno.