
Con la clasificación de la Celeste, esta pasará a conformar el listado de cabezas de serie, relegando a Holanda a integrar el bombo de los europeos. Así los cabezas de serie serán Brasil, España, Alemania, Argentina, Colombia, Bélgica, Uruguay y Suiza.
Francia, en ningún caso será rival de Chile. Pues su bajo ranking FIFA la posicionó en el mismo bombo de los sudamericanos y africanos.
En síntesis, dada la cantidad de clasificados de otros continentes, el escenario más posible para la FIFA es reunir en una misma tómbola a los clasificados de Asia (Australia, Japón, Irán y Corea del Sur) y Centroamérica (EE.UU, Costa Rica, Honduras y México) y en otra a los dos sudamericanos no sembrados (Chile y Ecuador), los cincos africanos (Nigeria, Camerún, Ghana, Costa de Marfil y Argelia).
Cabe destacar que no se pueden topar en el mismo grupo, rivales del mismo continente (a excepción de los europeos) ni del mismo bolillero.
Con estos antecedentes, la Roja de Jorge Sampaoli integrará el grupo de España, Alemania, Suiza o Bélgica. El peor escenario sería a enfrentar a los campeones del mundo y Holanda en el mismo grupo. O a Alemania e Italia. A eso habría que sumarle que Chile podría además, compartir grupo en alguna selección de nivel medio y con experiencia en mundiales como EE.UU, México, Corea del Sur o Japón.
Un escenario favorable será integrar el grupo de Suiza, rival que la Roja ya enfrentó en Sudáfrica 2010, o Bélgica. Otro europeo accesible sería enfrentar a Rusia o a Bosnia, así como también Grecia. De ahí en más, no sería malo para la Roja compartir grupo con un rival centroamericano o asiático de menos renombre como Honduras, Costa Rica o Irán.