Un sorpresivo y simultáneo allanamiento se realizó en la cárcel de Punta Arenas, el cual fue encabezado y monitoreado por el director regional de Gendarmería (s), teniente coronel Vicente Monje, quien destacó el trabajo desarrollado durante el año y la política preventiva que lleva adelante la institución penitenciaria.
Las razones del allanamiento, que principalmente dicen relación con resguardar la seguridad tanto de las personas privadas de libertad como de los mismos funcionarios, comenzó a las 18 horas y fue concretado en cuatro módulos de la unidad, logrando incautar cinco teléfonos celulares.
“Con esto se busca minimizar los riesgos y evitar situaciones conflictivas por los usuarios del sistema y, en ese sentido, el trabajo efectuado por el área operativa regional a cargo del alcaide subrogante y el equipo especializado, quienes trabajaron en conjunto con los funcionarios de acá en el penal, da cuenta de un buen procedimiento. No se registraron conflictos y se da cuenta que se incautaron cinco teléfonos celulares, lo que es un balance positivo. Nunca es bueno que hayan elementos prohibidos en el penal, pero cuando lo comparamos con otras situaciones, es favorable. La procedencia de estos teléfonos deberá ser investigada y eso le compete netamente al alcaide del penal”, dijo el oficial de Gendarmería.
El objetivo del procedimiento a nivel país era intervenir los sectores donde permanecen internos de alto compromiso delictual y minimizar hechos de violencia al interior de las unidades penales. “Esta intervención responde a la necesidad de evitar que las personas bajo nuestra custodia provoquen actos de violencia y se agredan entre ellos mismos o a nuestros funcionarios”, explicó Monje.
Finalmente, la autoridad hizo un positivo balance y explicó que los responsables de la infracción a la normativa vigente quedan a la espera de las sanciones correspondientes que defina el alcaide actual de la unidad.
Durante el allanamiento no se habrían detectado mayores anomalías, siendo informado al ente respectivo sobre la tenencia de los teléfonos, para que se investiguen los cursos a seguir.
No se descarta que a futuro se vuelvan a efectuar allanamientos en los distintos módulos del complejo penitenciario.