A fin de año se espera que Haru Oni comience su producción de combustible carbononeutral o e-combustible, elaborado sobre la base de hidrógeno verde.

Así lo informó ayer el gerente de HIF Energy, Rodrigo Delmastro, quien indicó que la idea es avanzar en este proceso paso a paso. De hecho, Haru Oni, la planta experimental de esta compañía recientemente levantada en Punta Arenas, no producirá hidrógeno verde para venderlo o comercializarlo, precisó la empresa, sino más bien con fines de investigación. “Su producción será muy acotada, pues justamente lo que busca esta planta demostrativa es mostrar estas nuevas tecnologías y la producción corresponde a un volumen muy pequeño. En etapas posteriores, más grandes, se busca producir e-combustibles en mayor cantidad”.

Primeros destinos

La producción de la planta actualmente en construcción ya está comprometida al fabricante de autos Porsche, que la utilizará en sus centros de prueba en Alemania, informó Delmastro.

-¿Y se entregará algo en Punta Arenas?

“Efectivamente, estamos evaluando dejar una pequeña parte en la ciudad, para que -igual que en Alemania- podamos tener la experiencia de los combustibles carbononeutrales, pero es algo que está en estudio como otras alternativas, y que requieren de permisos, estudios, etcétera”.

-¿Es necesaria alguna adecuación del vehículo para usar este tipo de combustible, por ejemplo, comprar algún kit?

“Cualquier auto puede usar este combustible carbononeutral sin necesitar adecuaciones a su motor”.

-¿Y el precio?

“Hoy el precio de este e-combustible es mucho más caro que el convencional, pero en la medida en que avancen las tecnologías y podamos escalar los proyectos, este valor se irá reduciendo haciéndolo competitivo. Por eso es tan importante poder ir avanzando”.

Investigación

Como parte de esta labor de investigación, la Universidad de Magallanes (UMAG), HIF Chile y Gasco GLP firmaron la semana pasada un acuerdo para la construcción y operación de un laboratorio científico de e-combustibles o combustibles verdes.

Las instalaciones del laboratorio, que consideraron una inversión de casi un millón de dólares, tienen por objetivo ser el espacio de control de calidad de los combustibles carbononeutrales que producirá la planta demostrativa Haru Oni, así como la realización de actividades de investigación, desarrollo e innovación con los subproductos de la planta.