Cuatro jornadas de juicio bastaron para que el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas condenara a un hombre por abusar sexualmente de sus dos sobrinas.
Los hechos ocurrieron en fechas indeterminadas entre 2017 y 2019, desde que las primas tenían entre siete y nueve años de edad. El hombre –que es conviviente de la tía consanguínea de las víctimas– les tocó su zona corporal y genital, tanto por encima como por debajo de la ropa. Los ataques se perpetraron en su domicilio y en la casa de la abuela de las niñas.
De acuerdo a la acusación, el condenado cometió los abusos de manera reiterada, ya sea a solas con las niñas o cuando una estaba en presencia de la otra.
Los hechos fueron develados inicialmente por la víctima mayor, quien le comunicó a su padre que ella y su prima menor eran atacadas sexualmente por el acusado. El papá estampó la denuncia a la Policía de Investigaciones (PDI) para que se iniciaran las indagatorias.
El condenado fue formalizado en diciembre de 2021. Desde entonces cumplió con arresto domiciliario nocturno, arraigo regional y prohibición de acercamiento a las víctimas.
El lunes se inició el juicio en su contra. En su alegato de apertura, la fiscal Wendoline Acuña indicó que “las conductas desplegadas por el señor fueron abusivas, debido a que las ejecutó aprovechando el acceso que tenía a las niñas por el vínculo que él tenía con la tía de ellas. Se habían generado lazos de confianza con la familia que le permitieron vulnerar su indemnidad sexual”.
Tras cuatro días de rendición de pruebas, los jueces condenaron ayer al acusado por abuso sexual reiterado. La sentencia se conoce el próximo 16 de agosto y el Ministerio Público solicita la imposición de 8 años de cárcel.