Cuando se anotan cifras, desde otras regiones del país se sorprenden cuando se analiza el parque automotor de cada una de las regiones. Magallanes hoy tiene un auto cada dos habitantes y eso es una cifra muy alta, muy por sobre el promedio nacional y son muchos lo que creen que por ello en Magallanes hay mejores sueldos y una mejor calidad de vida. Cuan alejados de esa realidad están. Porque pese a tener muchos vehículos, el costo de la vida es altísimo y poseer un automóvil en Magallanes no es un lujo, es una necesidad. Y los valores de los vehículos acá, especialmente usados con más baratos que en el resto de Chile. La pregunta viene ahora y es ¿Punta Arenas está preparada para el considerable aumento del parque automotor? Desde hace un tiempo y con la escarcha y la nieve invernal, se pueden apreciar algunos tacos y caos vial en ciertos horarios en las calles de Punta Arenas. El fenómeno se incrementa en horarios de ingreso y salida de los colegios (cuando hay clases presenciales) y de la actividad comercial. Una de las razones que explica esto es el incremento en el parque vehicular, el cual en una década creció de 37.546 a más de 75 mil en la Región de Magallanes, según el Informe Anual de Medio Ambiente del Instituto Nacional de Estadísticas (INE). A nivel país la cifra asciende a los 5.168.480 vehículos. Desde el Ministerio de Transportes han señalado que en los próximos cinco años Chile podría superar la barrera de los siete millones de vehículos. Si analizamos las cifras nos damos cuenta de que en nuestra región hay un auto por cada dos personas. Es alta la cifra, la proporción debe ser una de las mayores a nivel nacional y ello radica en la necesidad del automóvil en la zona más austral. Una proyección de los últimos 10 años en el país apunta a que la tasa de motorización es de 84,7% y Santiago está bajo el promedio, con 69,5%. En las regiones se produce una mayor densidad. En Magallanes, siempre nos preguntamos, ¿por qué no hay una subvención en los precios de los combustibles? Ahí se nos viene a la cabeza la mentada frase de que el auto acá no es un lujo, tal como la calefacción es una necesidad. Pero también hay que considerar que se deberán modificar las calles y avenidas, es decir, una millonaria inversión.