La corrupción que se está investigando en los más diversos niveles para mí es un drama aunque muchos me han señalado que es una tragedia que estaba oculta y que al salta al escenario público evidencia que el elenco conocido está incompleto.
La primera figura seguirá siendo el otrora influyente abogado comunista Luis Hermosilla, quien ha afirmado que, por largo tiempo, sin indicar cuánto, fuera el jefe de la inteligencia del partido al que perteneció (¿o pertenece aún?).
Se suma a este elenco los financistas de una operación con facturas falsas aún por investigar y de la que se habla poco; una abogada joven; su marido; ministras y ministros de la Corte Suprema, fiscales, jueces, funcionarios del estado y, recientemente, los querellantes tratan de sumar a lo que podría denominarse en la jerga teatro “Villano Invitado”, el ex Ministro del Interior de gobiernos anteriores.
Pero el elenco está incompleto, afirman miles y miles de chilenos.
Dicen que falya un alto asesor presidencial; de un ministro de Justicia Derechos Humanos que también llamó, wasapeó y compartió la mesa del abogado Hermosilla.
También está fuera del escenario principal un asesora y alta funcionaria de los gobiernos de la señora Bachelet; su hijo, su ex nuera, muy amiga del hombre más acaudalado de Chile, y un senador de lo más socialista que hay…pero el fiscal director de este drama no los ha llamado o han explicaciones estimadas satisfactorias.
El problema radica en que, mediáticamente hablando, ha habido tantas informaciones, tantos trascendidos, tantos whatsApp, que el caso Audios copó la agenda y “tapó” los devaneos de las Fundaciones con muchos Gobernadores regionales, con muchos funcionarios del SERVIU y la trama parece no tener y metió en su saco o red a peces de los más diversos tamaños y multicolores.
¿Y: las decenas de asesinatos a lo largo y ancho de esta Patria nuestra con mucho de “chilombiana” o “Chilezuela”; y la delincuencia que ha apoderado de calles, caminos y carreteras; y el narcotráfico y los ”drogos” sorprendidos al volante y la cesantía, y la economía, y los proyectos de inversión que no se harán en Chile sino que en Brasil, y los hoyos de los pavimentos de nuestras calles y avenidas puntarenenses, sin reparar y no sigo porque dentro de un par de años llevaremos la fibra óptica al continente antártico y espero que para entonces, mi sonrisa socarrona llegue a los actores de la comedia de las promesas.
Y para entonces Magallanes haya llegado a ser un región exportadora de combustibles verdes para los motores de los Ferrari y otros autos de alta gama.