Un hombre de 33 años fue formalizado ayer por el delito de femicidio frustrado, luego de agredir brutalmente a su pareja en la madrugada del lunes 23 de junio. La víctima, quien sufrió fractura nasal y pérdida de piezas dentales, se encuentra con lesiones de carácter grave.

Los hechos se desencadenaron cerca de las 3 de la madrugada del lunes, cuando la mujer agredida llegó a la 1ª Comisaría de Punta Arenas. Allí, denunció haber sido atacada por su pareja tras una discusión iniciada en el interior de un vehículo. Según su relato, la agresión incluyó golpes de puño y pie en distintas partes de su cuerpo.

Tras la denuncia, se activaron los protocolos de contención y se inició la búsqueda del agresor, quien fue localizado y detenido en horas de la mañana del mismo lunes.

Durante la formalización, el Ministerio Público detalló que la agresión comenzó en el domicilio de la víctima, ubicado en calle Las Heras de Punta Arenas. Una discusión por celos escaló rápidamente, con el sujeto propinándole una patada en la cara a la mujer antes de huir.

La situación empeoró cuando la víctima salió a buscar su teléfono celular en un vehículo estacionado fuera de su casa. En ese momento, el agresor, quien se encontraba escondido y cubierto con una frazada dentro del mismo automóvil, la abordó. Allí, continuó propinándole diversos golpes y la tomó fuertemente del cabello.

El fiscal Cristian Opazo, a cargo del caso, enfatizó la gravedad de las lesiones, señalando que la mujer sufrió fractura nasal y la pérdida de piezas dentales. Para el Ministerio Público, estos hechos constituyen un femicidio en grado de tentado, considerando la intención de matar.

El fiscal Opazo también conversó con los medios, indicando que el imputado presenta problemas de consumo de alcohol y drogas. Relató que, durante la agresión en el vehículo, el sujeto continuó recriminándole a la mujer una supuesta infidelidad, tomándola del cuello y amenzándola de muerte.

Ante la peligrosidad del agresor, la Fiscalía solicitó la prisión preventiva, medida que fue acogida por el tribunal. El sujeto fue ingresado a la cárcel de Punta Arenas y deberá permanecer privado de libertad durante los 60 días que se fijaron para el cierre de la investigación.

Se reserva la identidad del imputado por protección a la víctima.