Con espíritu de servicio y una fe viva, jóvenes misioneros del Sebas (Servicio Evangelizador de los Buenos Amigos) realizaron una intensa y emotiva misión pastoral en la comuna de Porvenir. Acompañados por sus asesores, Angie y Enrique, y acogidos por la comunidad de la parroquia San Francisco de Sales, compartieron momentos de integración, espiritualidad y cercanía que dejaron una huella en cada rincón visitado.
Entre las actividades más significativas estuvieron las visitas a enfermos, encuentros con niños y jóvenes, y la celebración de una misa en el Centro de Detención Preventiva, donde el gesto de entregar escapularios se convirtió en símbolo de esperanza para los internos. La jornada pastoral también incluyó una participación en la Radio Porvenir, extendiendo la invitación a toda la comuna.
El día culminó con una santa misa en la parroquia San Francisco de Sales, precedida por una caravana con la imagen de la Virgen del Carmen. Pese al clima adverso que impidió una procesión a pie, la celebración reunió a agentes pastorales, autoridades locales y vecinos, cerrando con una emotiva muestra de identidad: tres pies de cueca ofrecidos por miembros de la comunidad.
El párroco de Nuestra Señora de Fátima, padre Bernardo Astudillo, calificó la experiencia como profundamente enriquecedora y confirmó que ya se proyecta una nueva visita en febrero. Actualmente, la comitiva continúa su misión en Cerro Sombrero, celebrando misa en un lugar que no recibía eucaristía desde mayo. De esta manera, el testimonio de fe y encuentro humano sigue iluminando a las comunidades de Tierra del Fuego.