Entre los víveres que contenía la encomienda que una persona entregó el lunes en la mañana en la cárcel de Punta Arenas para un interno, personal de Gendarmería detectó que en el paquete iban bolsas de té, con marihuana en su interior.
El jefe del penal, comandante Ricardo Quintana Montoya, dijo que los antecedentes los pusieron en conocimiento de la fiscalía local. Reconoció que cada vez la gente está utilizando sistemas más novedosos y sofisticados para tratar de ingresar droga al penal.
Recordó lo que sucedió en junio pasado cuando también fue interceptada una encomienda con dos tubos de pasta de dientes que en su interior llevaban la marihuana. La operación la frustró “Rayen”, el can de Gendarmería.
La persona, que está identificada, dejó el paquete en el horario de entrega de encomiendas, entre las 9.00 y 12 horas.
Por eso, alrededor de las 13 horas, el fiscal de la especialidad de Drogas, Oliver Rammsy, solicitó la presencia de personal del OS-7 de Carabineros en el Centro de Detención Punta Arenas, “para efectuar un análisis orientativo a una sustancia incautada en el interior de seis bolsas de té, que se intentaban ingresar al interior del Centro de Detención Penitenciaria”, comunicó ayer Carabineros.
“Una vez realizado el análisis se pudo determinar que se tratarían de siete gramos 400 miligramos de marihuana elaborada, la que, previo retiro del té del interior de las bolsas, habría sido cuidadosamente introducida dentro de los saquitos para ser posteriormente consumida por los internos”.
Por instrucción del fiscal, personal de Carabineros (OS7) continúa trabajando en la investigación para dar con el paradero de la persona que habría llevado la encomienda al Centro de Detención, la que estaría identificada.
Quintana recordó lo ocurrido hace poco con un recluso que fue operado y le encontraron un ovoide de marihuana en el intestino. Esta persona aún se mantiene hospitalizada.