La decisión que debe tomar el Vaticano respecto del reemplazo del arzobispo de Santiago, monseñor Francisco Javier Errázuriz, está por resolverse, y uno de los nombres que circula al interior de la Iglesia Católica, es el del presidente de la Conferencia Episcopal y obispo de Rancagua, Alejandro Goic, magallánico que en 1971 fundó, junto al sacerdote Hugo Corneliessen, los Centros de Vacaciones (Cevas).
Al interior del círculo católico piensan que el próximo 10 de noviembre podría haber una respuesta desde Roma, aunque no se descarta que las novedades, respecto del tema, se den a conocer en la reunión de obispos de Punta de Tralca, convocada entre el 15 y 19 de noviembre.
Si bien, durante los últimos meses se ha desestimado la posibilidad que tiene monseñor Goic de asumir el liderazgo de la Iglesia Católica en Chile, debido a la relación un tanto distante que mantiene con las autoridades políticas, quienes lo conocen señalan que su sello es ser un pastor, en todo el sentido de la palabra. “Como pastor es profundamente cercano a la gente (…) Esa cercanía se manifiesta por un don particular que tiene, de empatía con las personas, de ponerse en el lugar de los otros, (…) independiente de su edad, de su condición social, política, él ante todo es un pastor”, señaló el vicario general y pastoral de Punta Arenas, Freddy Subiabre.