
El primero en votar fue el concejal Emilio Boccazzi (PPD), quien ante las observaciones que manifestó respecto del proceso llevado adelante por la CTE, afirmó que junto a su par Claudia Barrientos (PPD) y Mario Pascual (PS), habían acudido a la Contraloría Regional para que se pronunciara sobre la legitimidad de este.
Posteriormente, Roberto Sahr, Antonio Ríspoli, Vicente Karelovic (RN) y José Saldivia (DC), acogieron la propuesta leída por el alcalde, quien detalló los puntajes de las empresas participantes, donde Estrada era la mejor evaluada. José Aguilante se abstuvo.
Cuando llegó el momento de hacer el conteo de sufragios para determinar si el quórum de dos tercios requeridos se alcanzaba, el edil manifestó su abstención argumentando que “voy a esperar lo que diga la Contraloría, porque no conozco los antecedentes”, aseguró.
Esto hizo reaccionar inmediatamente a los concejales, puesto que si el alcalde lleva los temas al Concejo Municipal, según lo que indica la ley, los representantes deben aceptar o rechazar lo que dice el jefe comunal, que en este caso, era lo que había resuelto la CTE, según lo leyó al inicio de la cita y como se ha efectuado en las ocasiones anteriores.
Ríspoli fue el primero en hablar luego de este pronunciamiento de Mimica, afirmando que “cada día que estoy sentado en esta mesa, tengo más dudas”, dijo molesto por lo que estaba ocurriendo.
En tanto, Saldivia notoriamente incómodo por la actitud del edil, aseguró que “no me voy a pronunciar sobre su voto, pero yo fui citado a votar por la propuesta del alcalde, previa su presentación. Mi voto está relacionado con su propuesta”, enfatizó.
Asimismo, aseguró que “esta votación no tiene legalidad. Siento que usted me ha hecho tonto, desde ahora voy a votar después que lo haga usted”, añadió Saldivia, puesto que a su juicio, “cuando usted cambió de proposición, porque quiso apoyar las gestiones en Contraloría, tuvo que haberlo dicho y haber suspendido el proceso”, puntualizó.
Asimismo, Sahr, estimó que “esto es inaudito, el subterfugio, el ardid, la pillería que utiliza el alcalde y los suyos. No tiene nombre”, afirmó, quien además apeló al dictamen de la Contraloría de 2003, que indica “que el quórum de dos tercios de un concejo municipal de ocho miembros está constituido por cinco de ellos”, lo que dejaría el sufragio de Mimica como decisivo.
Según lo explicado por el alcalde, se deberá esperar lo que manifieste el organismo fiscalizador y posteriormente se determinará el futuro de la licitación.
Padem
En la ocasión también se votó por el financiamiento del Plan Anual de Desarrollo de la Educación Municipal (Padem), el que fue aprobado sólo en $ 800 millones, cuando lo requerido eran más de
$ 1.200 millones.
Sahr, Karelovic y Saldivia, entregaron su sufragio en contra, ya que se mostraron en desacuerdo con algunas partidas, que tienen que ver con millonarios pagos a personas que han trabajado para la Corporación Municipal de Punta Arenas (Cormupa) y porque consideraron que hay puntos que no estuvieron detallados de la manera esperada como para financiarlos.
Los más de $ 400 millones pendientes deberán ser votados por el Concejo Municipal cuando sean requeridos por la Cormupa.