
Por tercera vez
Cuando aún no cumplía la tercera condena, y tenía suspendida la licencia de conducir, el 30 de enero de este año, cerca de la medianoche, Jorge Sánchez Catalán volvió a conducir en manifiesto estado de ebriedad. Al volante de una camioneta Hyundai, modelo Porter, circulaba por calle Cirujano Videla y al llegar a Carlos Condell no respetó el signo Pare y atropelló a José Cayumán Vargas, cuando cruzaba la calle.
Además, según la acusación que presentó el fiscal Eugenio Campos, Sánchez Catalán no le prestó ayuda a la víctima y huyó del lugar, por Videla en dirección al poniente, siendo posteriormente detenido por Carabineros en Teniente Serrano esquina avenida Presidente Eduardo Frei Montalva.
Los funcionarios pudieron constatar el estado de ebriedad del conductor por su fuerte hálito alcohólico, corroborado posteriormente por el examen de alcoholemia que arrojó como resultado 3.21 gramos por mil de alcohol en la sangre.
Sentencia
En la sentencia, el juez Juan Olivares Urzúa señala que el acusado incumplió una resolución judicial, dictada el 24 de octubre de 2009, que le prohibía conducir por seis meses. Ahora condenó a Jorge Sánchez Catalán, como autor de un delito de conducción de vehículo motorizado en estado de ebriedad causando lesiones menos graves, a tres penas que en total suman 623 días de presidio. A esto se añade la suspensión de la licencia de conducir por dos años, sanción que comenzará a regir una vez que cumpla las que tiene pendiente, en las otras causas.
El magistrado estableció que el condenado reúne los requisitos legales y le concedió el beneficio de la reclusión nocturna, “debiendo, en consecuencia, permanecer recluido entre las 22 horas de cada día y las 6 horas de la madrugada siguiente, por el lapso de 623 días”, concluye el juez.