
Se trata de Marianella Vivian Ruiz Pérez, aunque el juez Juan Olivares le otorgó la libertad vigilada, por lo cual deberá quedar bajo el control de Gendarmería por el mismo lapso de la pena.
En esta misma causa figuran otras personas formalizadas. Pero en diversas audiencias se zanjó la situación judicial de una decena de ellas, ya sea mediante procedimientos abreviados, simplificados o acuerdos reparatorios. Hay otras dos en contra de quienes se despachó una orden de detención, y dos que están citadas para el próximo 4 de enero.
La estafa consistía principalmente en acceder a créditos de consumo, y a apertura de cuentas corrientes, líneas de crédito y tarjetas de créditos, con antecedentes falsos. De acuerdo a la acusación de la fiscal, esto se gestó en el año 2007 y 2008, ocasionando altos perjuicios a las instituciones financieras, del orden de los cincuenta millones de pesos, debido a que los dineros entregados por estas transacciones no fueron pagados por los acusados, ya que no tenían respaldo financiero para ello.
En el caso de Marianella Ruiz, desde mediados de 2007 empezó a tomar contacto a través de sus conocidos, amistades y los familiares y los convencía de que ella podía ayudarlos a gestionar y obtener de los bancos créditos, para lo cual les aportaba documentos falsos, principalmente liquidaciones de remuneraciones, certificados de antigüedad laboral, certificados de cotizaciones previsionales e incluso a veces contactaba a terceros para que a través de poderes notariales, también falsos, pudieran retirar o cobrar los vales vista cuando las condiciones impedían que los clientes los hicieran directamente.
Ante el BancoEstado se presentó como vendedora de seguros y dijo que se encargaría de llevar sus clientes para créditos. Así ella misma presentaba los documentos falsos de los clientes, o bien se los entregaba a éstos, y ellos concurrían a efectuar los papeleos propios a la entidad bancaria.