Tal como había adelantado ayer el Sindicato de Trabajadores de Enap, el precio del gas sufriría una modificación perjudicial para los habitantes de la zona. Y así fue, dándose a conocer hoy que Gasco Magallanes traspasará un valor aún mayor al consumidor por este suministro a partir de febrero. A horas de terminar este 2010, el Sindicato de Trabajadores de Enap sostiene que este es un nuevo golpe para la comunidad magallánica y sobre todo para quienes pertenecen a los sectores más vulnerables de nuestra sociedad.
El presidente de la organización, Alejandro Avendaño, asegura que en esta situación sólo existe un responsable que es el gobierno, negando la posibilidad a la petrolera de continuar ofreciendo valores que se ajustaban a los bolsillos locales como hasta ahora había sido. Ante esto, Avendaño insiste en que “Enap está en condiciones de ser distribuidor sin necesidad de contar con intermediarios”.
De igual forma, los dirigentes recordaron las palabras del Presidente de la República, Sebastián Piñera, quien aseguró en su última visita a Magallanes que se mantendrían los precios del gas para el sector residencial. “Su compromiso debe ser que el Estado subsidie el gas en un mayor valor, pero devolviendo este monto de subsidio a Enap para que no se vea afectada en su resultado final”, manifestaron.
A nivel local, responsabilizan al gobierno regional y a su máxima representante, la intendenta Liliana Kusanovic de su falta de empatía con las problemáticas y requerimientos de la población tan importantes como el gas, especialmente en la región, donde el suministro es utilizado también por el sector industrial y de transportes, por nombrar algunos y “no dar la cara en procesos tan determinantes como éste”, manifestó el máximo representante de la organización.