Ayer, en la primera sesión del Consejo Regional (CORE) del 2011, fue el turno de los miembros del cuerpo colegiado que trabajan con la intendenta Liliana Kusanovic para aprobar el financiamiento a los proyectos regionales , quienes unánimemente hicieron ver a la primera autoridad su rotundo rechazo a la medida del alza del gas.
Y es que los ánimos no estaban quietos. La preocupación ya se había extendido a los diversos sectores políticos representados en cada integrante del CORE y en cada uno de los asistentes a la sesión, entre los que se econtraban el alcalde Vladimiro Mimica y su Concejo, algunos presidentes de partidos políticos como Jorge Balich (UDI) y Juan Francisco Miranda (DC), el dirigente de la Asociación de Dueños de Camiones de Punta Arenas (Asoducam), Miguel Cárdenas y el mismo gerente de ENAP Magallanes, Roberto McLeod.
Es así como en un salón Nelda Panicucci repleto, a las 16.00 horas se dio inicio al Pleno del Consejo en un clima expectante por la aparición en escena de la máxima autoridad regional que estuvo fuera de sus funciones algunas semanas , puesto que le correspondería afrontar los cuestionamientos sobre el ausentismo que le han reprochado desde todos los sectores de la ciudadanía para ir en defensa de uno de los recursos esenciales para la región.
El debate
Pese a que eran 10 las mociones de financiamiento que se encontraban en tabla para discutir, el tema de gas se puso de inmediato sobre la mesa. Fue el core independiente Karim Bianchi quien abrió el diálogo y solicitó a Kusanovic modificar el orden de la tabla para conocer los alcances de la postura adoptada por la jefa del Gobierno Regional (GORE), quien justificó el alza aludiendo a la sustentabilidad del hidrocarburo en Magallanes (ver recuadro).
Sin embargo, se decidió respetar el reglamento de la sesión y seguir el procedimiento tal cual pero con una extensión, tras el término de la reunión, de una hora para efectuar el debate.
Al llegar el momento, el rechazo de los 18 consejeros, fue categórico, y cada uno tuvo la oportunidad de entregar su visión.
Primaron las críticas acerca de una mirada economista y sesgada del Ejecutivo del GORE y de una total falta de representación del sentir magallánico de parte de la autoridad frente al Presidente Sebastián Piñera, por lo que la mayoría de los consejeros coincidieron en que Kusanovic debía reunirse lo más pronto posible con el Mandatario para defender los intereses de la región.
En una posición claramente incómoda, la intendenta quiso salir al paso de los reparos al señalar que el alza del gas era por el bien del futuro de Magallanes.
“Debo opinar, porque también tengo el derecho si he sido emplazada por todos ustedes, que estoy sorprendida que nadie aquí vea que el incremento en la tarifa es por el bien de la región, porque si se aumenta el valor se va a ahorrar, eso es lo que postula este gobierno, que si el gas cuesta más, más vamos a cuidarlo”, sostuvo.
No obstante, sus palabras no tuvieron más llegada que las del compromiso que asumió de ir hasta La Moneda, en un posible viaje con los consejeros que le solicitaron realizar para resolver frente al nivel central la discusión, decisión que quedó inerte luego de que admitiera que la situación será imposible de revocar y que el alza se llevará a cabo igual.
A partir de esta postura, el core decé, Miguel Sierpe, concluyó: “Usted perdió la oportunidad intendenta de conseguir 18 aliados para defender el tema de nuestro gas. Si esa es su actitud, es como ir a pelear con las manos atadas, así que si no va a ir convencida de que esto se puede revertir mejor no vaya. Ya la desaprovechó y de esa manera, de ahora en adelante, no va a ser posible obtener beneficios para la región de Magallanes. En otras oportunidades, otras personas en su mismo cargo pusieron su puesto a disposición del presidente de la República”.
Quebradas las relaciones, hoy los consejeros se reunirán en sesión especial de comisión de régimen interior para elaborar un documento que refleje su postura frente a la difícil situación y las próximas acciones por adoptar en torno a la discusión.