Las intensas gestiones de los parlamentarios magallánicos hicieron que finalmente ayer los integrantes de la ACM flexibilizaran su postura y decidieran sentarse a conversar con el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla. Ante esta señal positiva para las tratativas de diálogo, el enviado de La Moneda finalmente tomó la decisión gubernamental de llamar directamente a, uno de los miembros de la ACM, José Hernández para invitarlo a sostener una mesa de trabajo con la intendenta Liliana Kusanovic y la gobernadora de Magallanes, Gloria Vilicic. Sin embargo, nuevamente el primer acercamiento no dio frutos pues luego de haber afinado la propuesta que se le haría al gobierno de parte de la ACM y la invitación de este ejecutivo para que la autoridad se dirigiera a la dependencias de la CUT a efectuar el encuentro, el subsecretario no llegó al lugar, llamando horas más tarde a una conferencia de prensa en la intendencia. Sus declaraciones fueron: “Queremos que el ‘facilitador’ del trabajo para acercar las posiciones entre gobierno y la ACM sea el padre obispo Bernardo Bastres, porque nosotros respetuosos de su investidura, nos pondremos a disposición para que nos abra la puerta al diálogo y la conversación”. La reacción a esta respuesta del gobierno de parte de la ACM fue inmediata: “No creemos que la intervención del obispo sea el meollo del asunto, aunque valoramos que lo quiera hacer, el tema de fondo es hablar directamente con el gobierno y nuevamente el subsecretario nos dio una negativa para conversar”, dijo Eterovic. Por otra parte, a la 1.15 horas de la madrugada de ayer y sólo después de conocerse la noticia de las dos muertes el gobierno se abrió al diálogo con la ACM. A esa hora la intendenta Liliana Kusanovic dijo en Pingüino Radio que “me comprometo a que en lo inmediato dialogaremos con los dirigentes de la asamblea”.