El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) realizó un sondeo con motivo de la variación de precios anunciada por la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) consistente en aumentos estimados en 32 pesos por litro para los tres tipos de gasolinas, mientras el petróleo diesel y el kerosén doméstico debieron subir $27 y $11 por litro respectivamente. El estudio se realizó el jueves en las capitales regionales del país y tuvo como propósito constatar la velocidad y la magnitud con que se han traspasado estas variaciones a los consumidores.
En el caso de Punta Arenas, los resultados detectaron que los precios de la bencina anotan en 93 octanos un precio de 742,3 pesos, en 95 octanos marca 759,3 pesos y en 97 octanos registran un precio de 777,1 pesos promedio.
En tanto, el petróleo diesel muestra un precio promedio de 612,5 pesos y la parafina doméstica no registra valores.
De acuerdo con la muestra, los precios promedio más bajos para las gasolinas de los tres tipos y el petróleo diesel se registraron en el Área Metropolitana (Santiago).
El precio promedio más bajo para el kerosén doméstico se registró en la VII región (Talca).
El precio promedio más alto para la gasolina de 93, 95 octanos y el petróleo diesel se registró en la X región (Puerto Montt) y el precio promedio más alto para la gasolina de 97 octanos se registró en la XI región (Coyhaique).
Cabe destacar que los expertos están señalando que para la próxima semana debería verificarse una nueva alza que iría entre los 15 y los 20 pesos por litro. Lo que llevaría a los combustibles de la región más cerca de los 800 pesos por litro.
Fondo de estabilización
En la misma línea del alza de los combustibles, el biministro de Minería y Energía, Laurence Golborne, recibió al senador PS por Magallanes Pedro Muñoz, quien le planteó que el Estado debe asegurar precios bajos y estables para el suministro de gas en Magallanes en forma permanente.
Afirmó que cualquier iniciativa legal que se proponga como consecuencia de la mesa de trabajo por el gas, debe contemplar no sólo un sistema de fijación de tarifa, sino especialmente un mecanismo correctivo que impida que los precios tengan variaciones muy significativas.
En esa línea, el legislador propuso establecer límites a las alzas anuales con la intervención directa del Fisco. “Si el resultado de la fijación es mayor, la diferencia debe absorberla el Estado como subsidio o a través de un Fondo de Estabilización Regional”, precisó.
Otro punto abordado en el encuentro fue la necesidad de adoptar, en forma urgente, una normativa para reservar el gas existente para el consumo domiciliario, como ocurre en Argentina y Perú.
Muñoz hizo entrega al ministro Golborne de un proyecto de ley que presentó en el Congreso y que establece la obligación de reservar el gas existente para el uso residencial. “Un país serio privilegia a sus habitantes y no a las empresas. Si queda poco gas en la zona debemos reservarlo para el uso residencial de los magallánicos”, aseveró.