
A sólo tres días de la conmemoración de Semana Santa, ayer la seremi de Salud, María Isabel Iduya, realizó una inspección a los locales que venden mariscos y pescados en el nuevo Mercado Municipal de Punta Arenas. Allí no se detectó ninguna anomalía, sin embargo, muchos puestos se encontraban cerrados a esa hora lo que ocasionó su extrañeza. La autoridad afirmó que se seguirá con esta actividad durante la semana.
Los locatarios cuyos productos se encuentren en malas condiciones para su expendio se arriesgan al decomiso de éstos, la prohibición de funcionamiento y la realización de un sumario sanitario.