“Las normas son para cumplirlas”, dijo el fiscal Oliver Rammsy, explicando así la decisión judicial de condenar a una persona a cinco días de cárcel efectivos por ingresar al Unimarc de Pedro Aguirre Cerda a sustraer una botella de pisco Campanario. El condenado es Paulo Benedicto Silva Godoy, una persona que registra otras causas judiciales y por eso la referencia de Rammsy a los incumplimientos. En esta ocasión el imputado ingresó el jueves al supermercado y ocultó la botella de pisco en una bolsa plástica. Cuando salía sin cancelar el producto uno de los guardias lo detuvo y luego llamó a Carabineros. Ayer, en el Juzgado de Garantía de Punta Arenas, el fiscal presentó un requerimiento verbal en contra del detenido, basado en el hurto que cometió en el Unimarc y que luego admitió frente al juez, recibiendo una condena inmediata de cinco días de presidio, sin beneficios extracarcelarios.
“Esta persona tiene otra causa por hurto, entonces, la idea de la sanción es que entienda de una vez por todas que no puede ser condenado y volver a cometer el mismo delito. La normas son para cumplirlas y seguramente la próxima vez la sanción será más severa, si vuelve a incurrir en el mismo delito”, advirtió Rammsy.
En los antecedentes penales de Silva Godoy figura una pena de 300 días de presidio por maltrato de obra a personal de la Policía de Investigaciones (PDI), sanción que cumplió el 22 de febrero de 2010.
En la lista figura una sanción por violación de morada en contexto de violencia intrafamiliar, donde lo condenaron a cancelar una multa de dos UTM, en junio de 2010. El 6 de enero de este año recibió una pena de 100 días de reclusión por desacato en violencia intrafamiliar. Y, en otra causa, por violación de morada fue condenado a cancelar una multa de dos UTM. Después, en febrero de este año, lo sancionaron por desacato a 100 días de presidio y registra una causa pendiente por el delito de desacato.