Aterrorizadas
Las encargadas del motel quedaron aterradas. En la declaración que prestó a la policía, Paula dijo: “Estaba en mi lugar de trabajo cuando sonó la alarma de la entrada, porque existen sensores, miré para afuera y vi dos sujetos jóvenes. Abrí la puerta y me preguntaron qué cabaña estaba disponible, le dije la número dos, cerré la puerta y apagué la luz para cerrar el portón. Cuando ingresaba a la recepción uno me preguntó por el valor de la cabaña y ahí el más joven me tomó del pecho y me puso una pistola a la altura del cuello y me decía que le entregara la plata. Yo grité para que Fabiola (la otra niña que esa noche estaba de turno) hiciera algo. El más alterado me colocó un cuchillo en el cuello. Me hicieron ingresar a la recepción y el más joven tomó a mi compañera y la intimidó con el arma de fuego y nos pedían que les pasáramos toda la plata, siempre amenazándonos con pistola y cuchillo. Le entregué 120 mil pesos y le dije que no había más”. Pero los tipos estaban exaltados y exigían más plata. Ese fue el momento más crítico para las víctimas, sobre todo cuando una de ellas, con un temperamento más fuerte y valiente, los encaró y trató de hacerles entender que no tenían más dinero. Un alcance que pudo costarle caro, porque los antisociales habían ingresado dispuestos a todo.
Fabiola, que en su declaración coincide con el relato de su compañera, señala que después las llevaron a la cocina y les pidieron una bolsa para colocar los tragos. Rompieron los cables del equipo musical, el DVD, la plancha, el cargador de pilas y el teléfono, y con el mismo las amarraron juntas. Al sector de las calderas, donde las abandonaron, avanzaron saltando y ahí permanecieron hasta que los antisociales huyeron. Fabiola logró zafarse y desamarrar a su compañera, quien llamó inmediatamente a Carabineros y a los dueños del motel.
Prontuario
Chambla registra condenas desde que era adolescente, por robo en bienes nacionales de uso público, robo en lugar habitado y robo con violencia consumado. Mientras que su compañero, Carlos Bilbao, tiene anotaciones penales como autor de lesiones menos grave, hurto falta y amenazas, según indicó la fiscal Acuña, para justificar la prisión preventiva.