
“Como CCHC nos sentimos orgullosos de poder entregar este beneficio a los trabajadores y a sus familias, quienes son finalmente nuestro capital más preciado”, profirió.
Por su parte, Alejandro Ojeda, administrador del proyecto del Teatro Municipal y representante de Bravo & Izquierdo, agradeció al gremio la posibilidad de realizar estas atenciones médicas. “Estar afiliado a la Cámara Chilena es muy importante porque podemos brindar estos beneficios a los trabajadores dentro del compromiso social que tenemos como constructora. Esto les ayuda a mejorar sus calidad de vida y de salud”, sostuvo.
El programa cuenta con un tecnólogo médico, un oftalmólogo y una laboratorista. El operativo comienza con la evaluación del primero de éstos, quien determina si la persona necesita o no ser atendida a través de una evaluación oftalmológica. En caso que así lo requiera, el oftalmólogo lo evalúa para detectar enfermedades asociadas a la vista, pudiendo darse el caso de presión ocular, glaucoma, cataratas, migrañas o jaquecas (situación común y pocas veces asociada por quienes padecen estos trastornos). Una vez que detectó alguna anomalía procede a la derivación profesional correspondiente, según sea el caso o gravedad de la patología detectada, y además se les hace entrega de dos pares de lentes, los que son obtenidos luego de que la empresa haya cancelado $2.000 por cada trabajador.