
Desde junio de 2003, el Servicio Nacional de Menores (Sename) ha ingresado al Sistema de Registro Único e Intervención en Peores Formas de Trabajo Infantil cerca de 4.000 casos, entre los cuales el 58,8% son niños y el 41,2% niñas. Además, el 72,7% tiene 15 y más años de edad y el 49% de ellos no asistía a la escuela. Sobre la actividad que practicaban, el 31,4% estaba involucrado en explotación sexual comercial, el 31,9% en alguna modalidad de trabajos que se estiman peligrosos por sus condiciones, el 16,6% en actividades ilícitas, el 11,1% en trabajos peligrosos por su naturaleza, y un 9% estaba involucrado en “otras” actividades estimadas como peores formas de trabajo infantil. “Hemos visto una fuerte disminución de las denuncias interpuestas por infracción a las normas que regulan el trabajo infantil. Si en el 2006 se recibieron 3.968 denuncias este año se han recibido 91, lo que es un notable avance (pero) mientras haya un niño que por trabajar, deje sus estudios, no nos sentiremos satisfechos”, señaló la ministra del Trabajo, Evelyn Matthei.