
Al siniestro concurrieron voluntarios de seis compañías de Bomberos que realizaron grandes esfuerzos por aplacar el fuego.
Sin embargo, la vivienda resultó absolutamente destruida. Se desconoce el origen de las llamas, el que será dilucidado tras la investigación bomberil respectiva.
Una mujer que habitaba el domicilio sufrió un shock nervioso. Su pareja, un transportista que está fuera de la región, sería el propietario del inmueble.