El maestro Roberto Bravo cumplió una notable presentación el martes reciente en la capital de la provincia de Última Esperanza. “Fue una noche mágica”, tal como lo adelantó el pianista al arribar a la zona. Ante una audiencia de aproximadamente 800 personas, el connotado músico actuó por primera vez en la ciudad natalina. Demostró su calidad, fuerza interpretativa y talento reconocido y valorado a nivel mundial.
En el gimnasio del liceo Monseñor Fagnano, el público disfrutó de obras de Astor Piazzolla, Frederic Chopin, Benedetto Marcello, Johann Sebastian Bach, Franz Liszt, Ennio Morricone y una selección de autores latinoamericanos. La impecable intervención se extendió por casi dos horas y los asistentes –de pie- agradecieron y ovacionaron el trabajo del maestro.