FMI: “La economía mundial está en una fase peligrosa e incierta”.
Analistas dijeron que Italia ya se encuentra en un territorio en el que Grecia, Irlanda y Portugal tuvieron que buscar rescates. Ayer, las principales bolsas del viejo continente que a esta hora marcan tendencias negativas, por el inestable escenario europeo, arrastrado principalmente por la situación política en Grecia y principalmente en Italia.
Precisamente, el mercado romano lideró la baja, con el FTSE MB de Milán anotando una caída de 4,09 %, a 15.023,92 unidades, mientras que el Ibex, retrocedió 2,84 % hasta los 8.276,80 enteros. El Dax, por su parte, hizo lo propio retrocediendo en 2,70 % para llegar a las 5.800,56 unidades.
El CAC de París cayó 2,46 % para llegar a las 3.065,99 unidades, mientras que el FTSE 100 de Londres, tuvo pérdidas por 1,97 % para alcanzar los 5.497,41 enteros.
Renuncia de Berlusconi no mejora el panorama
Después del anuncio del Primero Ministro Silvio Berlusconi el martes -donde señaló que habrá elecciones anticipadas en febrero y que no se postulará-, surgieron pocas señales de que se pueda formar un nuevo gobierno capaz de supervisar las reformas.
Analistas dijeron que Italia ya se encuentra en un territorio en el que Grecia, Irlanda y Portugal tuvieron que buscar rescates.
Así, el rendimiento de los bonos a diez años subió por encima de lo que se considera la “línea roja” del 7%, y los diferenciales entre los bonos del gobierno italiano y alemán también se elevaron a otro límite de 500 puntos básicos, llegando a un récord de más de 560.
FMI advierte de “fase peligrosa”
En la misma línea, el Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió ayer de una “espiral hacia abajo de incertidumbre, inestabilidad financiera y colapso de la demanda global” en la actual coyuntura económica.
Así lo expuso la directora gerente del organismo, Christine Lagarde, señalando que “la economía mundial está en una fase peligrosa e incierta”. Estas palabras fueron expuestas en una intervención en Pekín para pedir una actuación internacional conjunta. En caso contrario, según Lagarde, el mundo podría hacer frente a “una década de bajo crecimiento y alto desempleo”.
“Hay nubes oscuras sobre la economía mundial, y Asia tiene que prestar atención”, agregó. Aunque destacó que le gustaron los últimos pasos de los gobiernos europeos y de los países del G20, la francesa señaló que los “riesgos siguen siendo serios”.
Asia es una “luz” en el actual panorama, aseguró, pero no es inmune a lo que ocurre en el resto del mundo.