La Presidenta de Argentina, Cristina Fernández, viajó ayer a la localidad patagónica de El Calafate, provincia de Santa Cruz, para celebrar junto a su familia el Año Nuevo, antes de ser sometida el próximo miércoles a la intervención quirúrgica en la que se le extirpará un tumor canceroso en la tiroides. La Man-dataria transandina partió a bordo del avión presidencial desde el Aeropuerto de Buenos Aires a su lugar de descanso, el que definió en más de una ocasión como su “lugar en el mundo”. Allí lo pasará junto con sus hijos, Máximo y Florencia, familiares y amigos, y regresará el próximo lunes a Buenos Aires para ser intervenida.
Fernández partió a El Calafate luego de mantener ayer una intensa agenda con varias reuniones con funcionarios, dos de ellas con el vicepresidente, Amado Boudou, quien quedará a cargo del poder ejecutivo desde el 4 de enero y hasta el 24 de ese mes, cuando la mandataria, de ser positivo el resultado de la intervención, se reincorporará a sus funciones.
Medios argentinos señalaron que Fernández optó por pasar Año Nuevo en Calafate en vez de hacerlo en Río Gallegos, capital de Santa Cruz, a raíz de los enfrentamientos registrados el jueves en este último distrito entre la policía y trabajadores estatales, con un saldo de al menos 21 personas heridas.
Los disturbios se desataron por el rechazo de los trabajadores al tratamiento de una serie de leyes en la legislatura, que resolvió suspender la sesión cuando se disponía a discutir una reforma previsional y un paquete de emergencia económica impulsado por el gobierno santacruceño.
Intervención quirúrgica
Los médicos coinciden en que Cristina Fernández, de 58 años, podrá recuperarse plenamente y llevar una vida normal luego de someterse a la operación.
El cirujano Pedro Saco, quien estará a cargo de la intervención quirúrgica, aseguró que es “un honor” poder atender a la presidenta del país y dijo que aplicará el “procedimiento normal, el de todos los casos”.
El especialista, considerado una eminencia en Argentina, reconoció que mantuvo un encuentro con la Mandataria, aunque no quiso revelar por qué fue elegido para la operación.
La “Señora K”, quien el miércoles iniciará una licencia médica de 20 días, se someterá a la intervención en el Hospital Austral de la ciudad bonaerense de Pilar, donde se estima que permanecerá durante unas 72 horas, según el gobierno transandino.