
El motivo del alejamiento de Rubilar sería que se dedicará a elaborar y llevar a cabo la campaña política para la candidatura del concejal Emilio Boccazzi, quien se presentará como postulante a alcalde, y participaría de la primaria de la oposición, que se efectuará el próximo 1 de abril.
Así lo explicó ayer el jefe comunal, quien aseguró que este tema lo había conversado con anterioridad con su asesor, pues afirmó que “es incompatible que Domingo esté participando en una campaña política y tenga otras responsabilidades en el municipio, así que acordamos que dejara sus funciones a fin de año”, aseveró el alcalde Mimica, quien además confirmó que Rubilar no tendrá ninguna otra vinculación laboral con la municipalidad y tampoco tiene en mente a un reemplazante.
Una de las situaciones más polémicas que involucró al asesor y al edil, fue que a comienzos de año su sueldo aumentó cerca de un 30%, situación que posteriormente el alcalde Mimica aclaró afirmando que no se trató de un alza en la remuneración, sino que hubo un cambio de funciones que involucraba un sueldo mayor, que supera el millón de pesos mensual.
Otra versión
No obstante esta explicación que entregó el edil, trascendió según versiones de cercanos al municipio, que las relaciones entre el alcalde Mimica y Rubilar se quebraron totalmente luego de la reunión que se efectuó el jueves pasado, donde la esposa del edil, Sandra Guerrero, habría manifestado abiertamente su rechazo a que el asesor continuara trabajando con el jefe comunal, pues se habría enterado de gestiones que se estaban llevando a cabo sin que el edil estuviera al tanto.
Incluso, se habría generado una discusión que incluyó alzas en el tono de voz de algunos de los asistentes a la cita, en la que además habría participado la concejala y pareja de Rubilar, Claudia Barrientos, y Boccazzi, entre otras personas.
Ante esto, las relaciones estarían absolutamente distanciadas y la decisión habría sido no renovar el contrato a honorarios a Rubilar.