
“Ariztía no ha celebrado acuerdos, realizado conductas unilaterales ni adoptado decisiones conjuntas con los demás requeridas tendientes a restringir la competencia, tampoco se ha concertado con Agrosuper o Don Pollo para limitar la producción destinada al mercado interno y repartirse cuotas de mercado local”, señaló Ariztía en sus descargos.
“El requerimiento es profundamente injusto y ofensivo contra una empresa que durante 75 años ha contribuido con esfuerzo, honradez y trabajo al desarrollo y perfeccionamiento de la industria avícola”, agregó.
Asimismo, manifestó que entre los antecendentes presentados por la FNE se excluyen aspectos fundamentales que influyen en el mercado interno de los productos de carne de pollo, como lo son la influencia de las importaciones y los productos potencialmente sustitutos que restringen y disciplinan el comportamiento de las industrias nacionales, como las carnes de pavo, cerdo y vacuno.
A lo que añadió que la FNE carece de fundamentos al momento de probar que este supuesto acuerdo entre competidores haya perjudicado en alguna manera a los consumidores.
“Los productores nacionales de carne de pollo no tienen el poder de fijar los precios finales con que llegan a estos consumidores, porque la distribución de los mismos se hace en un 100% a través de terceros, es decir, a través de los supermercados, el canal tradicional y clientes industriales”, enfatizó.
En tanto Agrícola Don Pollo señaló que no ha participado en ningún acuerdo de limitación de la producción y asignación de cuotas. “Es más, la producción real de Don Pollo de los últimos cinco años es diferente de la planteada por la autoridad según las estimaciones de la APA, lo que confirma que su producción se resuelve en forma independiente”, precisó.
Por su parte Agrosuper sostuvo que “la evidencia empírica confirma que AS no sólo no ha seguido las supuestas sugerencias del presidente de la APA, sino que además no existe ningún antecedente- y no podría existir porque ello no ocurrió- que de cuenta de un monitoreo, ajuste o sanción a las requeridas”.
La Asociación de Productores de Avícolas (APA), señaló en sus descargos que “La proyección anual de la demanda y sus ajustes no constituyen un mecanismo para establecer limitaciones a la producción o ventas o asignar cuotas de producción o mercado y con seguridad podemos afirmar que tampoco produjo los efectos que se acusan”.