
Los expositores fueron Alfonso Rubilar, paleontólogo de invertebrados; Amaro Mourgues, geólogo y paleontólogo y Teresa Torres, académica de la Universidad de Chile, directora del proyecto que centralizó su investigación en la Península Antártica y en la provincia de Última Esperanza, esta última en Cueva del Milodón, sierra Baguales, cerro Guido y sierra del Cazador.
“Chile es un país que tiene la gracia de ser netamente su vegetación anciana, originada en una época de millones de años; entonces nosotros destruimos nuestro patrimonio, sin saberlo. Por ejemplo estos árboles que tenemos como los robles, los coigües, tienen una historia ancestral de millones de año, alrededor de 50 millones de años, quizás más, y tenemos la araucaria con un pasado ancestral de más de cien millones de años. Entonces nosotros tenemos algo que nos dejó la tierra que no sabemos apreciarlo”.