Tras la publicación en los portales de internet de los avances del polémico mall que se está construyendo en Castro, Isla Grande de Chiloé, en Punta Arenas -donde existe una gran cantidad de inmigrantes y descendientes chilotes- hubo reacciones. Señalan que es necesario la llegada de tecnología a la zona, pero que se debió construir en otro lugar.Sergio Flores, presidente de la Agrupación de Conjuntos Chilotes (Acochi), señaló que “la ciudad de Castro como zona aislada merece tener ese tipo de comodidades, pero no estudiaron el impacto en la ciudad. Castro es una urbe de calles angostas, por lo tanto el espacio se reduce por lo que la construcción debería estar a la medida de la ciudad propiamente tal y no sobresalir de los márgenes que corresponde a los terrenos”
Flores, quien tiene su familia en Castro, agregó que “el paisaje va a cambiar radicalmente. En todas las postales podemos observar la iglesia San Francisco pero al ver ahora por supuesto que va a cambiar el paisaje un 100%, de alguna forma se verá primero el mall y después se apreciaría el paisaje rústico que existe, pero Castro se merece nueva tecnología, pero debió haberse ejecutado en otro sector”.
Por su parte, el vicepresidente del Centro de Hijos de Chiloé de Punta Arenas, Faustino Aguilar, dijo que “significa un progreso para Castro, por lo que creo que es un tema comercial que se están viendo afectados con la creación del mall, por otro lado la construcción quizá no tiene la identificación con el lugar, pero creo que pasa por los comerciantes que están dolidos porque se van a ver afectados”. Respecto de la problemática por la ubicación, Aguilar manifestó que “esta construcción puede que esté muy cerca del centro, por lo que puede que genere problemas al estar cerca del terminal de buses y puede afectar la circulación vehicular ya que no están adaptadas a un gran flujo vehicular”.
