
“Es necesario que se fomente el buen comportamiento de los usuarios y profesionales en esta materia. Lo que se busca es asegurar el uso correcto de la licencia, aplicando una mayor fiscalización y sanciones ante las conductas fraudulentas e ilegales”, afirmó la Autoridad de Salud, agregando que este derecho tiene que ser utilizado de forma responsable para que el beneficio llegue a las personas que realmente lo requieren.
Para autorizar, rechazar o modificar las licencias médicas, la COMPIN debe pedir exámenes o informes médicos, verificar el reposo, solicitar antecedentes o informes al empleador, pedir documentos clínicos complementarios al profesional que extendió la licencia y disponer de otras medidas que permitan una mejor resolución del trámite.
Durante el 2012 la COMPIN Regional ha tramitado 22.768 licencias médicas, de las cuales un 28,44% ha sido fiscalizada y un 5,55% rechazada.