Una nueva inyección de recursos solicitó la Cormupa al municipio de Punta Arenas, dineros que de no ser entregados ponen en riesgo el pago de las imposiciones previsionales de los trabajadores de la entidad. Así se lo hizo saber el secretario general de la Corporación Municipal, Orlando Estefó, al alcalde Vladimiro Mimica, exponiendo que en junio le informó al jefe comunal de la necesidad de contar con
$ 1.000 millones para la gestión de los próximos meses. Sin embargo, tras la observación sólo entregó un aporte de $ 420 millones.
La cifra resulta insuficiente para cubrir las necesidades de la entidad, por lo que Estefó reiteró la situación y aseguró a Mimica que a partir del 10 de septiembre no se podrá pagar las imposiciones previsionales de los trabajadores en forma íntegra, arriesgando además la pérdida del pago de la bonificación de la mano de obra por $ 76 millones.
Ayer, los concejales fueron informados de la situación y de la modificación presupuestaria que permitiría allegar los recursos a la Cormupa. Sin embargo, el ánimo de los ediles no aparece como el mejor, considerando el malestar que motivó la decisión del alcalde Vladimiro Mimica por no acatar el fallo de la justicia para reincorporar como director de la Escuela Bernardo O’Higgins al presidente del Colegio de Profesores, Julián Mancilla Pérez, y cerrar las puertas a un acuerdo que significaría un gasto menor al pago de los $ 140 millones que la Cormupa deberá hacer efectivo al dirigente durante las próximas semanas.
Golpe de gracia
Ante la realidad de la entidad que dirige los destinos de la educación municipalizada, la posición de Mimica es vista como un golpe de gracia a una corporación que hoy no cuenta con recursos para pagar imposiciones, mantener al día los consumos básicos de los establecimientos educacionales y mantiene un déficit que ya se acerca a los $ 4 mil millones.
La situación de la Cormupa, a todas luces insostenible, motivó a que en el mes de junio Orlando Estefó oficiara al alcalde para solicitar un aumento en la subvención municipal. En la oportunidad, el secretario de la corporación también le expuso la necesidad de repactar a 45 días la fecha de pago a las cajas de compensación y cooperativas.
La información a la autoridad comunal le fue entregada por Estefó en detalle y en los plazos correspondientes. Sin embargo, recién a una semana de la fecha límite mencionada, los concejales fueron informados de la modificación presupuestaria que deberán aprobar para evitar el descalabro de la entidad.
Dicho ordenamiento en los gastos, apunta a liberar recursos (por este mes) de
$ 165 millones, disminuyendo cuentas de mantenimiento y reparación de equipos informáticos, estudios e investigaciones, permisos y revisión de expedientes de obras municipales, desahucios e indemnizaciones, gastos en edificios, programas computacionales y aportes municipales.