
Producto del siniestro, una madre y su hija de cinco años lo perdieron todo. Ellos, lamentablemente, se vieron afectados por segunda vez en poco más de un año con una tragedia de idénticas características, ya que en junio de 2011 lo sufrieron en la Población Phillipi.
"Explotó el termo de la lavandería y alcanzamos a salir con los niños", manifestó angustiada Jurliette Sanhueza, quien arrendaba hace un año la casa.