En todo este desarrollo quien ha tenido una fundamental participación ha sido la asesora urbanista de la Municipalidad de Punta Arenas y coordinadora de la formulación del estudio y del proceso de aprobación, Patricia Jiménez, quien fue enfática en señalar que “lo importante es que hemos culminado un largo proceso, que se inició en el periodo del alcalde Vladimiro Mimica con lo que fue la formulación del plan, todo el proceso de participación ciudadana y que permitió finalmente llegar a las instancias técnicas del proceso de aprobación que nos tomó todo el año pasado”.
La profesional agregó que “esta es la primera modificación que se hace luego de 24 años al Plan Regulador Comunal de Punta Arenas”. Además, manifestó que existe un PRC vigente que data de 1988 y que si bien hubo alrededor de 16 modificaciones, éstas fueron puntuales y no abordaron el territorio íntegramente como lo hace el nuevo plan.
A su vez, explicó que el plan vigente no priorizó ser un promotor del desarrollo económico social de la comuna, lo que se implementa con las políticas urbanas desde el periodo del ex Presidente Ricardo Lagos. “Hay una mirada distinta de la ciudad, a su vez hemos propuesto la ampliación del radio urbano en 837 hectáreas sumado a cerca de 2.000 por concepto de extensión urbana”, destacó la asesora urbanista.
El Plan Regulador Comunal, según define Jiménez, es el principal instrumento que regula el uso de suelo y las condiciones de edificación en el área urbana; establece normas que permiten regular y proteger las zonas de riesgo, que son las áreas restringidas al desarrollo urbano; protege el patrimonio arquitectónico de la ciudad; establece las vialidades estructurantes que conforman la trama vial de la ciudad y conserva el carácter de los barrios residenciales en Punta Arenas.
Viviendas
Uno de los objetivos fundamentales de realizar una modificación después de 24 años es contar con suelos para instalar viviendas sociales debido al gran déficit existente, del orden de 3.000 propiedades, según informó la Cámara Chilena de la Construcción.
“El plan parte por un impulso importante que se dio en el anterior gobierno de (Michelle) Bachelet a la actualización de los instrumentos de planificación territorial en Chile. El Ministerio de la Vivienda financió este estudio inicial que abarcó aproximadamente 200 millones de pesos y luego hubo un seminario con la Cámara Chilena de la Construcción, en el que participó Mimica como candidato a alcalde. En éste se acordó poder abordar este desafío de actualizar el plan, porque estaba la urgencia de poder contar con suelos que pudieran factibilizar proyectos de vivienda social”, aseguró.
En este marco explicó Jiménez que si bien el plan no ejecuta proyectos, sí permite y facilita que se puedan desarrollar iniciativas de vivienda social, las que además requieren de varias otras condiciones, como infraestructura vial cercana, equipamientos de educación y condiciones de suelo óptimas para que su desarrollo, entre otros.
“El plan en sí es un instrumento que regula, establece qué y dónde se pude construir, en qué términos, es decir establece las reglas del juego, porque los proyectos que se podrían ver asociados dependen de otras líneas de inversión y financiamiento para que se puedan materializar”, manifestó.
Club Hípico
Al ser consultada Jiménez sobre los terrenos del Club Hípico, los cuales quedaron fuera del Plan Regulador Comunal, informó que este tema fue debatido en la etapa del anteproyecto, formulando la comisión técnica una serie de alternativas que fueron expuestas al concejo para poder incorporar esos terrenos a la nueva modificación, al igual que el interesado, quien expuso en cerca de tres oportunidades, sosteniéndose que efectivamente se trata de un sector estratégico, cuyas dimensiones, historia y posible potencial de desarrollo son enormes, siendo también vital desde el punto de vista de la conectividad vial, pero que “sin embargo no hubo los consensos y esto no entró lo suficientemente desarrollado a tiempo. Estos procesos son largos, tienen muchas aristas y finalmente se optó por mantener las condiciones vigentes, no obstante existe la posibilidad de que a futuro se pueda incorporar mediante un seccional”, explicó.
Agregó que “es un terreno que requiere una mirada más profunda respecto del qué se quiere construir ahí, y eso va a ser fundamental para poder consensuar entre el municipio y los privados”.