La fiscalía local decidió mutar, en procedimiento simplificado al imputado, lo que no es compartido por el representante legal de la víctima. La Dirección regional del Servicio Nacional de la Mujer (Sernam), a través de su asesor jurídico, Ramón Ibáñez Álvarez, presentó una querella criminal en contra de una persona que en vísperas de navidad protagonizó un traumático episodio de violencia intrafamiliar, delito por el cual fue formalizado el 26 de diciembre.
Se trata de César Gallardo Chávez, de 48 años, quien amenazó a su pareja en presencia de los hijos: “Mamá viene con el hacha”, le advirtió uno de los menores a la mujer, de lo contrario pudo resultar lesionada.
La querella detalla los hechos que desencadenaron la denuncia por VIF, propiciada por la ingesta de alcohol.
La pareja salió de compras al supermercado, el 24 de diciembre, y el imputado compró una botella de pisco. Posteriormente retornaron al domicilio familiar sin inconvenientes. Alrededor de las 20.00 horas, de la víspera de navidad, una pareja le llevó regalos a los hijos. Al hombre le tocó una consola de Play Station y a la niña le regalaron una muñeca Barbie.
Después de la cena, siendo aproximadamente la una de la mañana, el querellado comenzó a beber alcohol, mientras la mujer miraba televisión.
Más tarde César Gallardo se abalanzó sobre la mujer y le dijo: “Te vas a acostar conmigo, aunque seas violada”.
Producto de los gritos llegó el hijo en común de la pareja, quien comenzó a golpear al antisocial en la espalda exigiéndole que la soltara. En vista de esto, el hombre amenazó al niño con romperle el Play Station y de que saldría en el mismo cajón “que la perra de tu madre”.
El hombre producto de la embriaguez se quedó dormido, lo que la mujer aprovechó para acostar al hijo que estaba muy asustado, “producto del actuar desmedido y no ajustado a derecho de su padre”, indica la querella.
“Viene con el hacha”
Sin embargo, el imputado se despertó y desde el living escucharon un fuerte ruido. El niño creyó que su propio padre había roto el juego que tanto añoraba, sin embargo lo que rompió fue un coche de su hija. Luego escucharon un fuerte portazo proveniente de la cocina.
El niño, muy asustado, vio a su padre salir al patio trasero de la casa, ingresando a la vivienda con un hacha, razón por la cual el menor comenzó a gritar para alertar a su madre: “Mamá viene con el hacha”, le dijo cuando ella amamantaba a su hija de sólo tres años.
La víctima le pidió al hijo que se escondiera en el dormitorio y que se quedara tranquilo, que nada pasaría, toda vez que el llanto del menor, producto del miedo, era incontrolable.
En esos momentos César Gallardo ingresa al hogar con el hacha y comienza a golpear las puertas y paredes del hogar, acto que duró entre cinco y diez minutos aproximadamente.
Luego el descontrolado jefe de familia ingresa al dormitorio donde estaban los menores y la querellante. Le gritó a la mujer que se levantara, la tomó de ambos brazos y la trató de golpear, y al esquivar la agresión cayó al suelo. Luego el imputado tomó un cuchillo y mientras se dirigía a donde estaban los niños ella se interpuso y se lo lanzó a ella.
Luego, a través de un mensaje de texto a la hija mayor, que estaba en otro lado, se logra comunicar con Carabineros y la policía se dirige al hogar, en Villa Nelda Panicucci.
El agresor fue detenido y formalizado por el fiscal Oliver Rammsy. Ahora enfrentará la querella que acaba de presentar el Sernam.
Valer derechos
La fiscalía local decidió mutar el procedimiento, requiriendo en procedimiento simplificado al imputado.
“El ejercicio de las facultades del órgano persecutor no puede traer aparejada la consecuencia de privar a la víctima del derecho que le otorga expresamente la Carta Fundamental a tener un proceso racional y justo en el cual pueda hacer valer sus derechos, logrando de esta manera una tutela efectiva de los mismos por medio de una sentencia”, plantea el abogado Ramón Ibáñez.