
Al realizar al registro de la bodega, se le encontró 1.430 kilos de cobre, equivalente a 5 millones de pesos. La PDI, a través del Grupo Especial de Bienes Robados (Gebro), tras fiscalizaciones a casas de compra y venta de artículos usados, joyerías, metales y chatarrarerias, entre otros, logró detectar que un comerciante de chatarras no estaba dando cumplimiento a lo referido en la norma, al no mantener el libro de “Actas de Procedencia”. Al realizar al registro de la bodega, se le encontró 1.430 kilos de cobre, equivalente a 5 millones de pesos.
Se determinó que éste procedía del desarme de una estructura industrial. El material fue devuelto a su propietario.