
La desigualdad de género sigue presente en nuestra sociedad, a pesar de los avances de la modernidad. Persisten las discriminaciones salariales, marginación
en los espacios de decisión en el ámbito público y privado. Estas diferencias no tienen sustento racional, no existe argumento que pueda explicar el menor pago de una mujer por igual puesto laboral y en las mismas condiciones profesionales o técnicas. No hay justificación para que las mujeres tengan menor presencia en el ámbito directivo o político”.
Por otra parte manifestó que “para impulsar este cambio se requieren políticas públicas que permitan la integración de las mujeres al mundo laboral, sumando más salas cunas y jardines infantiles y una educación de calidad, todos derechos que la sociedad debe garantizar. Por eso, este 8 de marzo junto a los saludos y a las expresiones de afecto las mujeres requerimos un compromiso para impulsar estos cambios y construir una sociedad sin discriminaciones, más solidaria, más armónica que otorgue oportunidades para el desarrollo de las capacidades de hombres y mujeres sin distingo, este es mi compromiso con las mujeres y las
familias de Magallanes”, finalizó Mancilla.