Mónica Aguilar solicita en la querella que los antecedentes se remitan al Ministerio Público, “formalice, acuse y en definitiva el tribunal lo condene (a Vergara) al máximo de la pena legal establecida para este tipo de delitos”.
En la querella se indica que la madre de la víctima conoce hace tres años al denunciado, y en tal relación de confianza Vergara se ofreció a reforzar las articulaciones de la niña, de 17 años, producto que sufre de colitis ulcerosa y el médico tratante había recomendado este trabajo. “Como profesor de educación física se ofrece a realizar la extraprogramática de acondicionamiento físico, ya que según él, tenía otros alumnos y lo hace en forma gratuita”.
Entre noviembre de 2012 y 14 de enero de 2013 el docente retiraba a la niña en su domicilio y la llevaba al gimnasio. Un cambio de actitud la llevó a revelar a su madre lo que le hacía el profesor y que dieron origen a esta querella.