En tanto, desde la Isla Riesco los mineros entregaron su apoyo a sus compañeros de Punta Arenas y realizaron una protesta simbólica durante el desayuno que entrega la empresa.
Miguel Bravo, presidente del Sindicato de Transportes de Río Verde, afirmó que “lo que demostramos fuera de las instalaciones de la minera es el descontento de los trabajadores. Somos quienes mantienen las operaciones diarias en la mina, por lo tanto nos sentimos importantes y, por ende, solicitamos que se nos cancele con sueldos dignos y nos den un bono de producción que tienen todas las mineras en el país”.
Mañana un nuevo sindicato de trabajadores votará a favor o en contra de la huelga, dependiendo de si aceptan o no la propuesta de la empresa. De esta manera serán casi 240 los operadores de la Mina Invierno que paralicen sus faenas para exigir mejores condiciones laborales.
Frente a esta situación, Cristián Culún, presidente del Sindicato de Empresa Equipos Mineros Río Grande, afirmó que se trata de un problema que afecta a todos los trabajadores. “Nos parece injusto que la mano de obra magallánica se desvalorice tanto, en comparación con la gente que trajeron del norte. La empresa sí está en condiciones para que nos den mejores beneficios”, aseguró.
