
Esa tarde, a las 14.50 horas, Caicheo, operario de una máquina retroexcavadora trabajaba sacando tierra en calle Juan Williams, sector de Río Seco, según la fiscalía “por no estar atento a las condiciones y debido a la negligencia y faltas de medidas de seguridad saca la pala de dicha maquinaria sin percatarse que en sentido contrario transitaba por la calzada la víctima”. Vásquez lo hacía en su bicicleta y fue impactado por la retroexcavadora, a raíz de lo cual el afectado resultó con el sillín de la bicicleta incrustado en el ojo.
Carlos Contreras, abogado del acusado, plantea que “existieron circunstancias que imposibilitaron que solamente haya sido la acción de mi representado lo que generó el hecho dañoso. Hay situaciones en que priman otras circunstancias y no un designio penal”, y por eso espera que absuelvan a su cliente.
Para la abogada querellante, Martina Pradenas, en este accidente hubo una negligencia. Tal vez no la intención de dañar, pero nos parece que esto debe ser determinado por un tribunal”.