En un discurso marcado por el rechazo a la desigualdad y precariedad laboral, y un homenaje al fallecido sindicalista Juan Pablo Jiménez, Bárbara Figueroa expresó las demandas y ejes de acción de la organización de los trabajadores. Con un homenaje a Juan Pablo Jiménez, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa dió inicio a su discurso ayer al mediodía en el acto de conmemoración por el Día del Trabajador en Santiago. Además, uno de los principales puntos a lo que se refirió durante la jornada fue el fin de las AFPs, asegurando que “los trabajadores de Chile queremos terminar con la AFPs, esa es nuestra gran demanda”. También destacó la necesidad de mejorar la institucionalidad laboral en cuanto a las necesidades de los trabajadores en sus trabajos.
En tanto, la presidenta fue enfática al indicar que no van a cambiar de posición ante la “propuesta de 250 mil pesos de piso salarial”, asegurando que a pesar de que el gobierno establece que hay empleo pleno, los trabajadores chilenos viven una “profunda desigualdad y una precariedad laboral”.
Otros de los ejes que Figueroa destacó en su discurso, tuvieron relación con la gestión del gobierno en cuanto a temas de igualdad social y lo ocurrido con con los resultados de la encuesta Casen y el Censo del año pasado. En este sentido, la líder sindical calificó de “inmoral” que el estado trate de “vender una imagen país que está lejos de corresponder con la realidad”.
En cuanto a las movilizaciones que se realizarán durante este año, la líder sindical aseguró que este año “Chile ha perdido el temor a expresarse” y que en lo que va del año esto ha quedado demostrado con las diferentes manifestaciones que han realizado trabajadores de la minería, medios de comunicación y estudiantes. También hizo hincapié en que estas manifestaciones sociales “no se tratan de la movilización como un fin, sino como un instrumento”. Asimismo, Figueroa convocó a nombre de la CUT, a un paro nacional de trabajadores para el jueves 11 de julio.