En el marco del tercer Encuentro de Cámaras de Comercio de la Patagonia, realizado ayer en Punta Arenas, emisarios de Argentina y Chile acordaron una serie de medidas para reactivar y favorecer el desarrollo productivo de la pequeña y mediana empresa (Pymes) de ambas naciones, en un año particularmente duro debido a la crisis económica.
Una de las ideas centrales de esta cita, fue consolidar los lazos entre ambos países para detectar y producir oportunidades de negocios para los empresarios, tanto argentinos como nacionales, buscando aumentar el comercio y las exportaciones, aprovechando la red de acuerdos comerciales que a suscrito Chile.
“Tenemos 20 acuerdos comerciales, con 56 países del mundo, lo que implica un mercado potencial de 4.000 millones de habitantes a los que se puede apuntar, que es más del 90% del PIB (Producto Interno Bruto) mundial”, afirmó la asesora económica de la Dirección de Relaciones Económicas Internacionales (Direcom).
Al respecto, el presidente de la Cámara de Comercio de Punta Arenas, Marcos Ivelic, manifestó que “con esto ya estamos cumpliendo con creces los objetivos de estos encuentros y más aún en los avances que estamos logrando a nivel de la facilitación de los pasos fronterizos, donde aduana chilena y argentina han concretado un tremendo avance para facilitar los trámites”.
Por su parte, el transandino Gustavo Barbosa, vicepresidente de la Cámara Binacional, comentó que “hay mucha potencialidad en el intercambio económico entre ambas regiones, y como se ha planteado, poder utilizar a Chile como plataforma de exportación. Hay un mundo de oportunidades ahí, y sería interesante para el desarrollo y evolución de nuestras sociedades aprovecharlo”.
La cita, sirvió además para concretar las bases de una estructura jurídica, específicamente una Secretaría General, que hará cumplir los acuerdos tomados y que será la representante de las cámaras binacionales ente el Banco Interamericano de Desarrollo.
Alianzas
Las alianzas estratégicas se concretará de dos formas: las empresas argentinas traerán los productos y servicios a Chile, acá se hará una integración productiva para cumplir con el sello de origen, para luego ser exportados a los países con los cuales se tiene ventajas arancelarias. Otra forma es que las empresas transandinas se instalen directamente en territorio nacional, y desde aquí (con origen chileno) se envíe a otros mercados, como China, Corea, Estados Unidos y México.
Estas iniciativas buscarán instruir a las Pymes binacionales para que puedan apuntar a mercados extranjeros con sus productos, propiciando un despegue comercial. “Las empresas grandes saben hacer esta integración productiva. Esto está dirigido especialmente a la pequeña y mediana empresa, que no sabe cómo usar esta red de acuerdos comerciales; entonces con este estudio nosotros tomamos productos potenciales y los orientamos”, explicó la representante de Direcom.