
Los cigarrillos venían en dos contenedores de 40 y 20 pies procedentes del Puerto de Colón, Panamá, con destino al STI (San Antonio Terminal Internacional). El manifiesto de carga indicaba que se trataba de cajas con cascos de seguridad y generadores eléctricos.
Robledo destacó la experticia de los aduaneros y señaló que el decomiso se inserta en un plan nacional destinado a detectar y fiscalizar este tipo de contrabando. En lo que va del año 2013 el Servicio Nacional de Aduanas ya ha decomisado un total de 2 millones 750 mil cajetillas, lo que supera incluso el total de cualquier año.
Los cigarrillos son de las marcas Golden Deer y Jaisalmer, tanto en versiones normales como light, y por lo general se comercializan en sectores populares o se remiten a terceros países. Además del valor aduanero del contrabando, la evasión de impuestos calculada es de más de US$3,5 millones de dólares, equivalente a $1.750 millones.
Además de los cigarrillos, en uno de los contenedores también se encontraron 1.206 lentes por un valor de evasión tributaria calculado en 1.286 dólares.
El Servicio Nacional de Aduanas puso todos los antecedentes del caso a disposición de la Fiscalía Local de San Antonio y presentó las respectivas querellas.