
Ayer, los presidentes de las comisiones de Constitución, Legislación y Justicia tanto del Senado como de la Cámara, indicaron que en el marco de la discusión de la Ley Emilia (busca elevar las penas para quienes conduzcan en estado de ebriedad y produzcan lesiones graves, gravísimas o la muerte), se podrían introducir mejoras al sistema.
Para el presidente de esta instancia legislativa en el Senado, Patricio Walker, “en el caso de Johnny Herrera, parece una burla que solamente le hayan dado 41 días de pena remitida; claramente la familia de la víctima se queda con una sensación de impunidad entendible”.
El parlamentario aseguró que “una de las discusiones que probablemente vamos a tener -con la Ley Emilia- va a ser regular la conducción en estado de ebriedad y bajo la influencia del alcohol. La idea es que esta acción sea vista como una imprudencia temeraria. Esa situación merece un reproche, probablemente no al nivel de como cuando hay una conducta dolosa, pero acá hay un delito de peligro que pone en riesgo la vida de mucha gente. Las personas que toman alcohol y después manejan debieran prever las consecuencias probables de esa acción y en ese sentido tiene que haber una sanción drástica”, explicó Walker.