Vargas no fue llevado a la audiencia donde el defensor pretendía explorar una salida extra judicial con la entidad defraudada. El acuerdo tendría relación con el pago de 30 millones de pesos, que Vargas cancelaría a la Confederación de Magallanes, previo a la tramitación de un crédito hipotecario. Sin embargo la entidad exige 60 millones de pesos, como lo indicó el propio abogado en la audiencia, cifra inalcanzable para el imputado.
“Existe una oferta bastante generosa de la confederación para llegar a un acuerdo, pagando 60 millones de pesos”. Indicó Arcos que la negociación está en pleno desarrollo, “pero la privación de libertad ata mucho a mi cliente para que pueda obtener un crédito”.
Demanda
Por lo mismo, el profesional prepara la demanda judicial que presentará los próximos días, porque a su modo de ver las cosas responsabiliza al casino, “porque sabiendo de la situación de ludopatía del señor Vargas, que en ese momento era el tesorero de la confederación y la misma persona que había participado en la venta del gimnasio a la confederación, le permitían seguir jugando”.
Argumenta que en los informes de la carpeta investigativa consta que Vargas apostaba cifras millonarias. Es más, hay fotos donde aparece recibiendo premios cuantiosos. “Ellos debieron adoptar las medidas para evitar que esta persona se arruinara e hiciera lo propio con la confederación”. Arcos critica a la administración del casino por no asumir una “acción de prudencia”, a raíz de lo cual plantea que “no pueden liberarse de la responsabilidad que les compete”.
Señala que en Punta Arenas hay muchos jugadores adictivos, y que “así y todo, viendo que sufren un cuadro de ludopatía, los dejan jugar, arruinándolos económicamente, lo que consideramos debe ser indemnizado”.
La demanda que presentará es por el total de la defraudación a la confederación, “porque nosotros consideramos que el verdadero culpable de esta defraudación es el casino que no tomó medidas de prevención para que una persona enferma no siguiera jugando”.