Luego de que se informara que Ximena Noa, auxiliar de párvulos de Punta Arenas y madre del menor con leucemia y cáncer testicular, había cedido a que su hijo recibiera tratamiento de quimioterapia, aclaró que sólo considera la posibilidad de que su hijo sea reevaluado por un nuevo médico.

La mujer explicó que no ha aceptado iniciar el tratamiento para su hijo, sino sólo aceptar que otro especialista lo revise, con acuerdo a lo que le ofreciera el director del Hospital de Valdivia, Patricio Rosas.

La madre tuvo una larga reunión con el equipo médico del hospital Clínico Regional de Valdivia, quienes lograron que modificara su postura de rechazar un tratamiento médico para su hijo Róbinson Gómez, de 11 años, luego que se le diagnosticara leucemia y cáncer testicular.

En un primer momento, Noa rechazaba el tratamiento porque "mi hijo sabe todo, sabe que se va a morir y él se niega, no quiere quimioterapia". Por este motivo la oncóloga Pilar Martínez interpuso un recurso de protección para obligarla a que someta al menor a dicha terapia, el que fue acogido por el tribunal.

Sin embargo, la acción legal quedó sin efecto luego que Ximena Noa aceptara la propuesta de los facultativos, para que el menor sea reevaluado.

El doctor Patricio Rojas señaló: "decidimos que lo mejor era hacerle entender a Ximena que Róbinson necesitaba tratamiento, la vez pasada (2005) le dimos una sobrevida de un año y tardó cuatro en tener recién una recaída; con la nueva quimioterapia los resultados podría mejorar, aún cuando la sobrevida que le damos sigue siendo de un año".