Tres cortes de agua en una semana lleva el Centro de Salud Familiar Mateo Bencur, un consultorio que en promedio atiende un número aproximado de 500 personas diariamente. El miércoles pasado, entre las 10.00 y las 20.00 horas, el servicio se mantuvo suspendido. El viernes 12, entre las 10.00 y las 15.00 horas, se repitió la situación. Y ayer, desde las ocho de la mañana a las seis de la tarde.
La directora, Sandra Vargas (en la fotografía), dijo que esta situación acarrea problemas a los usuarios. Lo peor es que como no son cortes programados, las personas llegan al consultorio y poco después se les avisa de que no serán atendidos. En ese momento hay que reprogramar las horas médicas. Dependiendo de la patología los reubican en otra fecha. Algunas personas que ayer llegaron por curaciones fueron reenviadas al Centro Comunitario de la Población Cardenal Silva Henríquez.
“Estos cortes de agua obligan a suspender todo el funcionamiento del centro. No solamente la atención médica, porque es necesario usar los baños, lavarse las manos y sin agua esto no se puede hacer”, indicó Vargas.