En entrevista concedida a Diario El Pingüino, describió esta tragedia como “un caso muy lamentable, que reviste un análisis y preocupación de los diferentes órganos del Estado, con énfasis en la prevención”. El oficial de la policía uniformada fue enfático en responde que “este es un caso que nos afecta a todos como sociedad, en el cual tenemos gente que ha resultado muerta y otras graves”, sin dejar de hacer una mención muy especial a los femicidios que hoy afectan a las mujeres de nuestra sociedad.
“Es un procedimiento que nos ha tocado como comunidad, aún cuando somos la región que tiene la menor tasa de victimización, según las encuestas”.
El general Weber espera que lo acontecido el fin de semana, con la muerte de Mario Rodolfo Wolf, el baleo de Claudio Sandoval y la despiadada agresión a Carola Barría, sea un hecho aislado.
Carabineros tuvo una participación amplia en este procedimiento, “donde pusimos a disposición todos los servicios, como Primera Comisaría y servicios de apoyo: OS-7, Sección Aérea Policial y el GOPE, para rastrear y dar con esta persona (Juan Ruiz Varas)”.
Simultáneamente prestaron una cobertura a quienes se encontraban en el hospital clínico, lo que coordinaron con la dirección del centro asistencial, “a petición de ellos mismos”.
Cuando hay hechos que sobrepasan el nivel de normalidad, como lo acontecido con Carola Barría, el general Weber explicó que Carabineros realiza un determinado perfil sicológico, como el informe que realizó personal del OS-9, que reafirmó la personalidad celópata del agresor y en su actuar criminal quedó en evidencia que era capaz de planear con mucha frialdad, acciones tan violentas como la cometida en contra de sus tres víctimas.
La frialdad del personaje quedó reflejada en los últimos mensajes que remitió a familiares cercanos, donde aseguraba que estaba dispuesto a enfrentarse a Carabineros y morir a lo “cowboy”.
El jefe policial insistió en calificar como “un hecho muy fuerte”, el episodio de sangre que protagonizó el autor, avalado por su perfil criminológico, pero espera que “esto decante”.
Trabajando en Chile, confesó que “nunca había visto algo así, salvo cuando estuve sirviendo en el extranjero, donde una señora fue asesinada y le sacaron los ojos. Pero acá jamás. Esto es realmente fuertísimo. El caso requiere una atención de los diferentes organismos públicos y hay que analizarlo estratégicamente para ver con qué red de apoyo se tiene que abordar y llegar a prevenir hechos similares”.
Aprovechó de reiterar el llamado a denunciar la violencia intrafamiliar, para que se entreguen los apoyos correspondientes de salud mental y los casos se puedan ir tratando.
Otros delitos
Punta Arenas es una ciudad tranquila, aunque el general Weber reconoce que hay indicadores que confirman un aumento en ciertos delitos, “pero también debemos entender de que hay mayor cantidad de población flotante y recurso humano que llega a la región. Tenemos un mayor crecimiento poblacional, todas son variables que hay que analizar y que inciden directa o indirectamente en los efectos en la delincuencia”. Es un tema, asegura, que ataña a toda la sociedad.