Un violento ataque sufrió la Fonda Cumbre del Rock Chileno, ubicada en el Parque O’Higgins, luego de que un centenar de personas pasara las barreras de seguridad y procediera a robar cerca de 10 millones de pesos. Pasadas las 4.00 de la madrugada de ayer una turba intentó ingresar al recinto, el que fue resistido por el personal de seguridad y por el mismo público, según indica Cooperativa, sin embargo, lograr entrar y sustraer dinero, carne y licor. Además, los antisociales intentaron incendiar el lugar.
Esto originó que la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, llamara a una reunión de emergencia a los fonderos y Carabineros para reevaluar el plan de seguridad para los días restantes.
“En algún momento ellos se pusieron a pelear entre grupos, entre pandillas, llegando a la reja principal de entrada”, dijo uno de los organizadores, Francisco Celada. Asimismo, agregó que “nosotros tratamos de resistir con nuestro personal de servicio y la gente que no quería que entrara esta gente, también nos ayudó.
El teniente de Carabineros, Roberto Moraga, señaló que se logró la detención de una persona, quien fue sorprendido causando desórdenes y lanzando objetos contundentes a las personas que se encontraban al interior del recinto. Sin emabrgo, fue dejado en libertad.
Carabineros tras ser aludidos como uno de los responsables del hecho por parte de los dueños de la fonda, el capitán de la Subcomisaría del Parque O’Higgins, Guillermo Bohle, señaló que actuaron en el tiempo oportuno.
“El llamado a la central nuestra ocurrió a las 03.50 horas. Personal de inmediato, tiempo de respuesta de 4 minutos, se constituyó en el lugar”, señaló el capitán durante esta mañana, luego que la producción de la fonda asegurara que la policía llegó 20 minutos después de ocurridos los incidentes”. La versión de Carabineros desmiente la información entregada por los fonderos afectados, quienes aseguran que sólo gracias al actuar de sus guardias, la turba compuesta por unas 70 personas logró ser sacada del recinto, llevándose numerosos productos y destruyendo parte de las instalaciones.